Belgrano: Vecinos se oponen a la construcción de una torre sobre patrimonio arquitectónico
La Legislatura porteña podría conceder una excepción al Código Urbanístico para que se construya un edificio de 20 pisos.
Los vecinos/as del barrio de Belgrano están en alerta porque el Gobierno de la Ciudad impulsa una excepción al Código de Edificación para que se pueda construir una torre de veinte pisos en la parte trasera del petit hotel de la calle 11 de Septiembre 1535, que en el año 2019 adquirió el empresario Eduardo Cohen Watkins por 3 millones de dólares, señala Infobae.
A pesar de que por ley es catalogada como Patrimonio Arquitectónico de la Ciudad de Buenos Aires, la Legislatura porteña podría conceder una excepción al Código Urbanístico para erigir el edificio de 20 pisos. El Petit Hotel no será demolido, pero el proyecto presentado prevé la edificación de una torre en el mismo predio de la residencia, algo que está prohibido por la normativa vigente.
La iniciativa ya tuvo la primera aprobación en el recinto en lo que se llama “primera lectura”, pero por tratarse del cambio de una Ley Especial deberá hacerse una audiencia pública no vinculante y luego volver a discutirse en una segunda lectura, cuya sanción en caso de ser positiva, será definitiva.
La residencia tiene 1600 metros cuadrados con mármol de carrara y pisos de caoba. Posee siete dormitorios, tres livings, cochera para 8 autos, ascensor que conecta los 4 pisos, gimnasio y cava de vinos. El valor patrimonial de la mansión se remonta a 1925, cuando la familia Breyer le encargó al arquitecto José Abuaf la construcción de esta mansión de estilo neoclásico.
La edificación se ofreció por primera vez en mayo del 2017 en 7,5 millones de dólares. Este petit hotel perteneció al empresario Matías Garfunkel y a su esposa, la mediática Victoria Vannucci, quienes en medio de un conflicto con sus ex empleados decidieron irse del pais y terminaron vendiéndola por la mitad de su valor. Fue adquirida por el empresario Eduardo Cohen Watkins por 3 millones de dólares.
Cohen Watkins es uno de los herederos del multimillonario brasileño Edmond Safra, cuarto esposo de su madre, Lily Cohen, dueño de la casa en Cumelén donde el ex presidente Mauricio Macri suele pasar sus vacaciones.
“La calidad de la obra junto con el hecho de constituir una referencia en el barrio le permitieron a la mansión entrar en el catálogo de edificios patrimoniales con nivel cautelar, ley que lógicamente prohíbe la construcción de torres sobre ellos. Originalmente fue el petit hotel de la familia Breyer, para luego ser sede del Banco Mercantil y más tarde residencia del matrimonio mediático”.
consignaron desde la agrupación Basta de Demoler.
En los últimos días, el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta remitió a la Legislatura varios convenios urbanísticos que fueron aprobados en primera lectura, entre los que figuraba la construcción de una torre sobre el predio de esta residencia protegida por ley”, advierte la ONG Basta de Demoler. “A cambio de este permiso excepcional, la empresa de Cohen Watkins se compromete a pagar una suma de dinero al Gobierno porteño”, agregan los integrantes de la ONG.
“El proyecto ingresó a la Legislatura pero no hay nada avanzado”, explicó a Infobae el presidente de la Comisión de Planeamiento Urbano, el diputado Daniel Del Sol. “Hubo una primera lectura en el recinto en donde fue aprobado, pero ahora vienen las Audiencias Públicas y luego volverá a la comisión y al recinto para su segundo tratamiento”, agrega el legislador del PRO.
«Vamos a escuchar a los vecinos en la Audiencia Pública pero no sabemos cuándo va a terminar porque hay anotadas para hablar 398 personas, que deberán pronunciarse sobre 11 Convenios Urbanísticos, uno de los cuales es éste, el de la calle 11 de Septiembre en Belgrano”, explicó Del Sol.
“Si no lo aprueban ahora, lo van a aprobar más adelante”, dijo a Infobae Mauro Sbarbati de Basta de Demoler. “Lo que sucede es que están utilizando una casa que tiene valor patrimonial para jerarquizar en el mercado de bienes y raíces, los metros cuadrados que están vendiendo. Y el problema es que el Gobierno de la Ciudad flexibiliza a través de los convenios urbanísticos el código de edificación y las leyes de protección patrimonial. Entonces aparece una torre de 20 pisos en el patio de atrás de una casa catalogada. Este no es el único caso. Hay un montón de casos más”, agrega Sbarbati.
“Lo que está pasando es que las edificaciones que son Patrimonio Arquitectónico de la Ciudad son una herramienta más para posicionar en el mercado el desarrollo inmobiliario. Y en definitiva, con la torre arruinan la mansión.
«Esto ya lo hicieron en el Palacio Rocatagliatta en el barrio de Coghlan y quisieron hacerlo también con el Convento Santa Catalina de Siena en avenida Córdoba y Reconquista. Esto es lo que llamamos arquitectura parasitaria, edificios que aparecen sobre edificios protegidos que no deberían ser modificados. Hay un montón de leyes que protegen al vecino de un edificio catalogado, pero no se cumplen”, cerró Sbarbati.