El Sindicato de Trabajadores Caninos busca incluir mascotas en geriátricos
La entidad gremial suma firmas para su proyecto de incluir mascotas en hogares geriátricos. La iniciativa promueve una mejora en la calidad de vida de los adultos mayores.
En la Ciudad de Buenos Aires una de cada tres familias tiene al menos un perro que forma parte de ellas pero cuando una persona mayor ingresa a un geriátrico debe separarse de su mascota, y deja de tener contacto.
El Sindicato de Trabajadores Caninos (STC) formuló un proyecto de ley que busca permitir la visita o convivencia de mascotas en establecimientos geriátricos. Una iniciativa que busca mejorar la calidad de vida de nuestros adultos mayores, a la vez que ayudaría a darle hogar a cientos de perros que hoy se encuentran en refugios
El proyecto se presentó el año pasado en la Legislatura porteña. En los fundamentos del proyecto señalan que la incorporación de mascotas en hogares geriátricos mejoraría la calidad de vida de los adultos mayores ya que la convivencia con animales levanta la autoestima; el estado de ánimo; reduce el estrés; estimula la mente; activa la memoria; la actividad física; aumenta el sentimiento de responsabilidad y la estimulación social.
El psicólogo social Cristian Daniele, afiliado al Sindicato de Trabajadores Caninos e impulsor de la iniciativa contó que “En 2021 trabajaron en este proyecto dentro de la virtualidad y luego cuando comenzaron las aperturas, empezaron a llegar a los geriátricos. «Tuvimos una pequeña muestra en un geriátrico de Belgrano y tuvimos un resultado increíble”, contó Daniele al portal Sitio Gremial.
Y relató: “La convivencia con un animal es muy importante para lo emotivo, para movilizar, para poder vincular a una persona que se desprende de todo lo afectivo cuando llega a un geriátrico”. “A través de una mascota pueden por lo menos cubrir una pequeña parte de ese desprendimiento».
Además, agregó «está clínicamente comprobado que mejora la salud cardiaca, la memoria cognitiva, la motricidad fina. Hay abuelos que no quieren tener contacto con nadie y con una mascota empiezan a socializar, tienen más ganas de volver a vivir”, resaltó el profesional.
A través de una campaña de difusión que ya logró el apoyo de más de 22 mil personas siguen juntando firmas para lograr la aprobación de la iniciativa: change.org/PerrosEnGeriatricos.
En países de Europa, está permitido el acceso de mascotas y pueden entrar a geriátricos y hospitales”. “Todo requiere de un trabajo interdisciplinario de profesionales, como psiquiatra, psicólogo, psicólogo social, para evaluar cada individuo y su situación, y también un instructor de animales para adiestrarlos, educarlos, para que sean compañía de los abuelos”, explicó el impulsor de la iniciativa.
Con la implementación del proyecto “los abuelos pueden estar con una mascota, tener la posibilidad de recibir la compañía, sacarlos al jardín, darles de comer, de tomar agua, lo que para ellos es una ocupación que genera muchos beneficios”.
“La idea es que haya animales preparados especialmente para que puedan ingresar a los geriátricos y, con toda una organización, que los abuelos también puedan recibir a su propia mascota como al resto de la familia, porque el animal es parte de su familia, y todos quieren la visita de su mascota”, expresó Daniele.
“Soy psicólogo social y trabajo con la terapia asistida, estoy especializado en chicos con TEA, en adultos de la tercera edad. Durante la pandemia conocí al sindicato, les conté la idea y nos pusimos a trabajar en este proyecto. Había muchas limitaciones por la pandemia, pero ahora se puede trabajar y el proyecto ha tenido muchas firmas de apoyo, porque lo que queremos es ayudar a las personas mayores”, concluyó el profesional.