Historia en las calles de Villa Ortúzar: ¿Quién fue Álvarez Thomas?

En un barrio tranquilo como Villa Ortúzar, también nos encontramos con avenidas de mucho tránsito y con nombres de mucha historia. Hoy caminamos en el recuerdo de Álvarez Thomas. 

Esta avenida es una de las arterias principales que recorren nuestro barrio, a pesar de no ser doble mano como otras avenidas importantes como De Los Incas y Triunvirato. Aunque sólo va en un sentido para los vehículos, de este a oeste, su trayecto es uno de los más transitados por ser camino directo hacia la Av. General Paz. en su continuidad con la calle Galván en Villa Urquiza y luego con la Av. Ricardo Balbín en Saavedra.

Álvarez Thomas es una avenida con muchísima vida en la sección correspondiente a Villa Ortúzar. Por un lado, posee una importante cantidad de árboles de gran porte, los cuales crean un paisaje verde muy pintoresco propio de los barrios de casas bajas. Sin embargo, también causan ciertos problemas por la caída de ramas durante las tormentas que azotan la ciudad. En el último tiempo, Álvarez Thomas ha sufrido varios cortes de tránsito y accidentes por esta situación.

Por otro lado, contiene a varios negocios que mantienen una constante afluencia de personas, en particular con una gran propuesta gastronómica. Entre los lugares emblemáticos que podemos nombrar se encuentran la pizzería La Mezzetta en Álvarez Thomas casi esquina Forest, considerada entre las mejores de Buenos Aires por su fugazzetta rellena, y la parrilla Lo de Charly, en Álvarez Thomas y Donado, abierta las 24 hs y muy concurrida durante todo el año.

También en esta avenida encontramos el popular local bailable para adultos New York City, conocido hoy en día como «La City», el cual ocupa el edificio del antiguo cine Atlántico. Este boliche con más de 40 años de existencia, por el cual pasaron personajes tan variados como Sting, Maradona, Guillermo Vilas, Marta Minujín, Luca Prodan o Ricardo Darín, es una parada nocturna de las más longevas y destacadas de la ciudad.

Esta arteria tan característica del barrio recibió su nombre actual hace más de un siglo, en el año 1893, reemplazando la denominación anterior que fue Córdoba segunda. En aquel entonces, época de trazados precarios en las zonas más periféricas de la ciudad, muchos caminos paralelos a la calle Córdoba recibieron esa denominación: varias calles se llamaron Córdoba segunda según en qué parte de la capital se encontraran; también hubo calles que se llamaron Córdoba Tercera, Cuarta, llegando hasta la décima siguiendo el paralelismo de la avenida de referencia.

¿Por qué se recuerda a Álvarez Thomas con una avenida?

José Ignacio Álvarez Thomas es recordado en virtud de su función como Director Supremo de las Provincias Unidas del Río de la Plata entre 1815 y 1816, período durante el cual se encargó de preparar el futuro Congreso de Tucumán para la Declaración de la Independencia. Si bien para julio de 1816 había dejado dicha función, el papel de Álvarez Thomas fue importante para dar final al período autoritario de Alvear en el Directorio, y para hacer cumplir durante su mandato el encargo de reunir a todas las provincias en un Congreso Constituyente.

Más allá de este lugar importante que le guardó la historia, nuestro ilustre protagonista nacido en 1787 en Arequipa, actual Perú, tuvo un pasado comprometido con la causa emancipadora de la Revolución de Mayo y posteriormente un paso por las filas unitarias opositaras a Artigas y más tarde a Rosas.

Llegó de joven a Buenos Aires debido a que su padre, el brigadier español y gobernador de Lima Antonio Álvarez, fue convocado al servicio español y su familia trasladada a la capital del Virreinato del Río de la Plata. A partir de 1799, Ignacio Álvarez Thomas comenzó su carrera castrense en Buenos Aires teniendo su bautismo de fuego en la segunda Invasión Inglesa de 1807, en la cual fue herido y capturado hasta la rendición y retirada británica.

La experiencia contra la invasión marcó a fuego su sentido patriota, por lo cual en 1810 rápidamente se enlistó en las fuerzas revolucionarias a pesar de su origen familiar. Su rol como teniente coronel fue destacado, por lo que logró un veloz ascenso en su carrera militar así como fue en aumento su prestigio en el círculo político de Buenos Aires.

Fue parte del proceso que destituyó a Alvear como Director Supremo, al revelarse contra las órdenes que había recibido de atacar a las fuerzas federales de Artigas, enfrentadas al poder central de Buenos Aires. Depuesto Alvear en abril de 1815, el Cabildo de Buenos Aires eligió como nuevo Director Supremo provisorio a José Rondeau, el cual no pudo asumir debido a que en ese momento encabezaba al Ejército de Norte contra los realistas en Salta y el Alto Perú. Debido a ello, el Cabildo eligió interinamente y como suplente a Álvarez Thomas para asumir el cargo ejecutivo.

Como Director Supremo, Álvarez Thomas comenzó los preparativos para cumplir lo que la nueva Junta de Observación organizada por el Cabildo de Buenos Aires había fijado como objetivo: la institucionalización de la revolución y la organización de las provincias bajo una declaración conjunta que consolidara la independencia y poder del Directorio. Sin embargo, el perfil unitario de dicho mandato y la debilidad política de Álvarez Thomas para lograr apoyo de los caudillos federales, llevaron a su renuncia y a que en el futuro Congreso de Tucumán las provincias sublevadas de la Liga Federal no envíen sus representantes.

Luego de estos sucesos, Álvarez Thomas fue un unitario a toda regla siendo parte de la lucha facciosa de la década de 1820, oponiéndose al gobierno rosista de Buenos Aires a partir de 1829. Su pugna llevó a que en 1836 sea desterrado a Río de Janeiro donde igualmente siguió conspirando contra Rosas. Una vez caído el Restaurador de las Leyes, en 1853 Álvarez Thomas volvió a Buenos Aires recuperando su grado militar y finalmente falleciendo en 1857. Su cuerpo reside en el Cementerio de la Recoleta y su apellido sigue resonando en nuestro barrio.