La oposición porteña rechazó la prohibición del uso del lenguaje inclusivo
Laura Velasco (FdT), Gabriel Solano y Amanda Martín (FIT) cuestionaron con dureza la decisión del ejecutivo local y señalaron que «prohibir expresiones de lenguaje inclusivo es fascista”.
Luego de conocerse la Resolución que firmara la ministra de Educación, Soledad Acuña, prohibiendo el uso del lenguaje inclusivo en los colegios, la presidenta de la Comisión de Mujer y legisladora del Frente de Todos, Laura Velasco y los diputados del Frente de Izquierda Amanda Martín y Gabriel Solano, salieron a cuestionar con dureza la medida y la tildaron de “facista”.
En ese sentido, Velasco afirmó que “es una nueva expresión de autoritarismo contra la comunidad educativa por parte de una ministra que piensa más en cómo llamar la atención para proyectarse electoralmente, para competir con la derecha más rancia y reaccionaria que cuestiona la ESI y la perspectiva de género”.
“Es una provocación de la ministra que nos deja en claro el desprecio que tiene por les docentes; el no haber aplicado durante tantos años con presupuesto y programa especifico la Educación Sexual Integral en las escuelas de la Ciudad de Buenos Aires y su falta de compromiso con garantizar espacios de trabajo para el abordaje de una escuela inclusiva y un lenguaje inclusivo con los actores de la comunidad educativa”, señaló.
Y agregó “Acuña acostumbra imponer en lugar de generar espacios de participación» y planteó tambien que “estamos en una sociedad cada vez más plural, por eso esto va a generar muchísima resistencia y malestar en la comunidad educativa, en particular en los y las adolescentes” sin dejar de lado que «esta reglamentación no tiene ningún fundamento científico y la misma ministra lo admite».
Finalmente precisó “en este momento sería más importante que la ministra pueda preocuparse por el recorte de presupuesto de su cartera de más de 12 puntos, de entregar computadoras con el Plan Sarmiento que discontinuó en la pandemia dificultando las clases virtuales, de la falta de gas en las escuelas con días de bajas temperaturas, de la comida en mal estado de los comedores escolares y de la recurrente falta de vacantes que niega el derecho a la educación a miles de estudiantes en la ciudad más rica del país”, sentenció la legisladora.
En la misma línea, Martín remarcó que “con una resolución completamente anacrónica la ministra Acuña pretende prohibir el lenguaje inclusivo en las comunicaciones escolares o textos de escuelas, en un claro ataque oscurantista a las diversidades de género y sexuales, en alineamiento con las Iglesias, atribuyendo su uso a una supuesta ‘ideología de género’”.
«Esto puede provocar persecuciones y mayor discriminación en las escuelas, en un intento de disciplinamiento a los que luchan por la ESI”, sentenció la legisladora que además forma parte del gremio docente Ademys.
Por su parte, Solano consideró que “la medida es claramente reaccionaria, prohibir el lenguaje inclusivo implica negar el derecho a la libre expresión de las y los docentes y estudiantes de la Ciudad” y remarcó que “la ministra Acuña y Larreta no sólo carecen de fundamentos científicos para establecer una relación entre el uso del lenguaje inclusivo y el rendimiento académico de los estudiantes, porque los resultados bajos en las pruebas estandarizadas luego de gobernar 14 años la ciudad son, en primer lugar, responsabilidad de su propia política, sino que demuestra un profundo desconocimiento de lo que sucede en las aulas”.
“Es un grito de guerra a las juventudes estudiantiles, a su espíritu emancipador, a la construcción de su identidad y a la docencia que se organiza y lucha por la ESI, también al Colectivo LGTBIQ+ y al movimiento de mujeres”, añadió y cerró pidiendo que haya “menos prohibición y más separación de la Iglesia y el Estado, esta resolución la vamos a enfrentar”.