Precios Cuidados: Envase chico, precio más caro
La Secretaría de Comercio descubrió irregularidades en los supermercados donde además no respetan las listas de Precios Cuidados.
El Gobierno nacional actualizó hace una semana el programa de Precios Cuidados con el objetivo de atenuar la suba del costo de ciertos insumos y aliviar un poco los bolsillos de los ciudadanos.
Pero luego los consumidores encuentran en las góndolas que los productos de mayor necesidad vienen en presentaciones más chicas: envases minis de puré de tomate o de latas de gaseosas, yogur que se terminan enseguida, jabón en polvo, pasta dental y alfajores o edulcorantes.
Muchas empresas utilizan esta estrategia para poder bajar su precio y hacerlo accesible a un bolsillo menos solvente y entre no comprar y comprar menos, el consumidor elige muchas veces llevarse el producto más chico. Esta es la decisión que las empresas observan y contemplan al achicar sus productos.
La intención parece ser adaptar la oferta a las carencias de los bolsillos, pero también eludir los controles de precios. Asimismo, existen tambien las “avivadas”, cuando lo que se busca al reducir de manera ínfima las cantidades, es eludir la obligación de integrar un listado de precios máximos.
Por esto, la Secretaría de Comercio Interior viene realizando operativos de control en diversos puntos del AMBA con el propósito de controlar el efectivo cumplimiento del programa Precios Cuidados.
En esos procedimientos se han detectado lo que se denomina “transformaciones” o “productos mellizos”. Es una maniobra por parte de las empresas productoras que tiene por fin desvincular un producto que forma parte de Precios Cuidados y colocar otro con características casi iguales y así poder aumentar el precio.
Para Héctor Polino, titular de Consumidores Libres, comprar un producto en envase más chico muchas veces significa pagarlo más caro. Por ejemplo: una pasta dental en presentación de 30 grs. pagada $170 significa $5,66 por gramo, en tanto que si compro la de 90 grs a $350 estaré pagando $3,8 por gramo.
Y agrega “En los envases hay un conjunto de gastos fijos que son similares independientemente del tamaño, como los costos de logística y de impresión, el envase de vidrio, cartón o plástico, lo que difiere es la cantidad del producto que contiene”, señala Polino al explicar que el tamaño del envase no incide en el precio final.
Otro ejemplo para burlar el listado de precios máximos es cuando en la góndola figura el cartelito de Precios Cuidados para un producto de 500 gramos que está agotado, pero al lado aparecen varios paquetes de ese mismo producto, pero en envase de 510 gramos y obviamente con un precio mayor.
La maniobra es sencilla, llenan las góndolas con productos mellizos apelando a que serán pocos los consumidores que percibirán la diferencia. Estas picardías fueron detectadas el año pasado en medio de la pugna de los fabricantes por zafar del corset de precios máximo y motivaron varias sanciones.
“El objetivo es obtener más ganancias vendiendo en envases más pequeños, con lo cual el que termina beneficiándose es el consumidor de mayor poder adquisitivo que compra más barato en la presentación más grande”, consideró Polino.
