Vecinos denuncian por ruidos molestos al espacio «Tótem» de Villa Ortúzar
El local inaugurado como un centro cultural el 19 de diciembre del año pasado está ubicado en avenida de los Incas 4018 casi equina Plaza. «Esa noche comenzó el calvario que todavía padecemos en relación a los ruidos molestos que sufrimos» indican los vecinos.
En el mes de diciembre este medio informó sobre un nuevo espacio cultural que llegaba al barrio. El mismo brindaría talleres de arte, pintura, dibujo, escultura, tambien clases de canto, guitarra y danzas en general. Asimismo, Christian y María, sus dueños, nos contaron que los fines de semana por la noche, habría la típica gastronomía de Brasil con la opción de comida vegetariana y vegana. Una buena noticia para el barrio.
En estos días, vecinos y vecinas del local de Villa Ortúzar nos hicieron llegar una denuncia sobre los padecimientos que señalan sufrir durante las noches, debido a los ruidos molestos que llegan desde el espacio bautizado “Centro Cultural Tótem” en avenida de los Incas 4018 y que no les permite descansar con tranquilidad.
“El dueño de dicho local cuando nos acercamos para conocer su proyecto, nos indicó que se trataría de un espacio cultural y que no abriría mucho más allá de las 2 o 3 de la mañana” relata un vecino.
El local inauguró el domingo 19 de diciembre de 2021 “Esa noche comenzó el calvario que todavía padecemos en relación a los ruidos molestos que sufrimos desde dicha inauguración a la fecha.” señala y agrega “Donde vivo ya somos varios los vecinos que tenemos radicadas denuncias ante el Ministerio Público Fiscal de la Ciudad de Buenos Aires como así también en forma periódica nos comunicamos tanto al 911 como al 0800 fiscal, toda vez que resulta imposible el descanso, debido a los altos volúmenes que maneja el lugar”, afirma.
Los vecinos hablaron con el dueño del lugar y señalan que les dijo haber hecho una medición, desde el edificio lindante y que no superaban los decibeles permitidos por ley en horario nocturno.
“Dicha medición resulta por demás dudosa ya que, tal como se adjunta en fotografía, mediciones realizadas por vecinos del edificio arrojan valores muy superiores (70db) en las noches en que literalmente las paredes tiemblan ante el volumen de los equipos y los que produce la propia gente.” indican quienes viven lindantes al local.
Y continúan “Está de más decir que el término espacio cultural, no refleja para nada la actividad que allí se desarrolla, ya que es obvio que se trata de un ardid administrativo para lograr una habilitación por parte del Gobierno de la Ciudad, resultando obvio a estas alturas que se trata de un lugar donde funciona un bar y de paso se realizan o dictan clases de tango, zumba etc. El hecho de realizarse periódicamente Cenas Show (verdaderos recitales a todo volumen) da cuenta de que el fin perseguido es otro”, denuncian.
A continuación, detallamos parte de la denuncia que hicieron llegar los vecinos del barrio a este medio y que se presentó ante los organismos de la Ciudad de Buenos Aires.
“Vale detallar las «atribuciones”, que el dueño de ese espacio se tomó para el desarrollo de su «espacio cultural», señalan, a saber:
* ha violentado el árbol que se encuentra en la vereda atornillándolo en varios sectores para la colocación de carteles y luminaria. (en clara comisión de delitos ambientales).
* ha violentado también el cantero de dicho árbol, con la colocación de una barra (si, una típica barra de bar) con una estructura de madera y metal que amén de configurar un delito ambiental como ya se ha dicho, entorpece el paso de los transeúntes y configura también un peligro concreto para niños y ancianos.
* No solo lo antedicho configura la contravención de ocupación del espacio público previsto por el Código Contravencional, sino también ha colocado en la parada del colectivo Linea 80 (parada de los Incas y Plaza) una mesa con dos sillas al lado del caño que señaliza dicha parada, señalización que (sospechosamente) hace unas semanas apareció ya torcida.
Los vecinos finalizan su denuncia indicando que “la respuesta del dueño del lugar ante nuestros requerimientos (le escribimos via WhatsApp todos los días pidiéndole que baje el volúmen) es que el volúmen es el permitido y que la culpa en tal caso es nuestra por tener ventanas «comunes» en nuestros hogares”, señalaron.
Desde ya el dueño del local tiene este medio a disposición para responder o ejercer su derecho a réplica.
Normativa vigente:
Cabe aclarar que a partir de la sanción de la Ley N° 6099, que aprobó el Código Urbanístico de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, la Agencia de Protección Ambiental firmó la resolución RESOL-2019-177-GCABA-APRA que a través de sus anexos establece una actualización del Decreto 740/GCABA/07 y de sus normas complementarias.
Entre las modificaciones presentadas, se destaca que el local en cuestión está ubicado en el área de sensibilidad acústica Tipo II y los decibles permitidos son: lunes a sábados de 65 dBA (decibeles) en período diurno considerado de 07:01 a 22 hs y de 50 dBA en horario nocturno (de 22:01 a 07:00 ). Los domingos y feriados se consideran los correspondientes al periodo nocturno durante las 24.00 hs.
Ley Nº 1540, “Control de la Contaminación Acústica en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”.