Bibliotecas Populares en alerta ya que podrían perder su financiamiento

Bibliotecas Populares en alerta ya que podrían perder su financiamiento

A causa de la reforma tributaria aprobada por el Congreso en 2017, (art. 4° de la Ley 27.432), los organismos de fomento a la cultura dejarán de recibir la asignación que los financia a partir de fin de año.

Las bibliotecas populares son expresión de la decisión y acción de ciudadanos/as, quienes bajo la figura de asociación civil, guían a la entidad en la promoción del acceso al libro y la lectura.

Biblioteca Popular Benito Nazar – Villa Crespo – Comuna 15 – Foto: Facebook @bibliotecabenitonazar  

Los reclamos que se produjeron la semana pasada en el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) dejaron al descubierto la crisis en la que se encuentran los fondos especiales que financian a la industria cultural, entre ellas las bibliotecas populares de todo el país.

Esta situación provocará el desmantelamiento de las políticas que promueven el desarrollo y fortalecimiento de más de 1200 Bibliotecas Populares en todo el territorio, que lleva adelante la CONABIP desde 1870.

La citada reforma tributaria (art. 4° de la Ley 27.432) afectará tambien al Instituto Nacional de la Música (INAMU), Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), el Instituto Nacional del Teatro (INT), Radio y Televisión Argentina Sociedad del Estado (RTA), ENACOM, la Defensoría del Público de Servicios de Comunicación Audiovisual, y al FOMECA (fondo creado para proyectos especiales de comunicación audiovisual y el apoyo a medios comunitarios, de frontera, y de Pueblos Originarios).

La Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (CONABIP), quien otorga anualmente subsidios a las bibliotecas populares, dejarán tambien de recibir las asignaciones específicas a partir del 31 de diciembre de este año según lo establece la Ley 27.432, que se aprobó el 27 de diciembre de 2017.

Video de CONABIP

“Esto afecta no sólo a las bibliotecas de la Ciudad sino a las bibliotecas de todo el país. Las bibliotecas populares sobreviven con fondos muy exiguos, de manera tal que el aporte que hace CONABIP para gastos corrientes o para compra de libros son muy importantes; muchas bibliotecas quedarían en una situación muy compleja desde el punto de vista financiero”, afirmó al periódico El Barrio Pueyrredón Hugo Figueroa, presidente de la Federación de Bibliotecas Populares de Capital Federal y presidente de la Biblioteca Popular Pueyrredón Norte, ubicada en Cochrane 2334.
 
El Fondo Especial para las Bibliotecas Populares, por el que la CONABIP obtiene más del 50% de sus recursos (con los que distribuye los subsidios y desarrolla actividades), es reconocido por la Ley 23.351. Esta norma establece una asignación específica proveniente de la ley 20.630 (Gravamen de emergencia a los premios ganados en juegos de sorteo), que perderá vigencia a fin de año. 

“Las bibliotecas que reciben estos fondos ya los tienen asignados y que de pronto se los quiten significaría perder una fuente de ingresos. Hay muchas bibliotecas del interior que no tienen muchos aportes de sus provincias o de sus gobiernos locales, entonces la falta de la asistencia de la CONABIP las pondría en una situación crítica”.

explicó Figueroa

Ante esto, el pleno de la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares, Conabip están en estado de alerta y ha convocado a movilizarse para difundir la situación a las Bibliotecas Populares, usuarios y usuarias, talleristas y comunidades en general, editores y escritores y exigir la modificación de la ley.

Tambien, diferentes federaciones y bibliotecas populares de todo el país se encuentran planificando acciones para lograr que antes del 30 de noviembre se trate en el Congreso la derogación de la Ley y la plena vigencia del Fondo Especial, y así evitar que entre en vigencia y las desfinancie.