Enargas inició la campaña «El monóxido de carbono no se toma vacaciones»
Enargas promueve la prevención de accidentes por inhalación de mónóxido de carbono sobretodo en zonas turísticas donde suelen suceder por falta de mantenimiento de las instalaciones.
El Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) inició la campaña de verano sobre Prevención de Accidentes por Inhalación de Monóxido de Carbono y Uso Responsable del Gas bajo la consigna «El monóxido de carbono no se toma vacaciones».
El monóxido de carbono (CO) es un gas tóxico producto de la combustión incompleta del gas, cuya inhalación provoca lesiones graves a la salud y puede llegar a ser mortal.
La campaña busca fortalecer las medidas de prevención de accidentes vinculados a la inhalación de este gas mortal en especial en los lugares turísticos donde suelen ocurrir muchos accidentes provocados por la falta de mantenimiento de las instalaciones.
La presencia de este enemigo silencioso en los hogares suele ser tenido en cuenta con mayor rigurosidad durante el invierno pero dado que algunas propiedades permanecen cerradas y sin uso durante gran parte del año, las ventilaciones de los artefactos gasodomésticos pueden deteriorarse o los conductos obstruirse, dificultando así la correcta evacuación de gases al exterior.
Enargas promueve que, antes de iniciar las vacaciones en una casa de veraneo, se hagan revisar las instalaciones de gas por un gasista matriculado teniendo en cuenta que son ellos los únicos que pueden hacer instalaciones, reparaciones o modificaciones.
¿Cómo prevenir un accidente por inhalación de monóxido de carbono?
- En lugares cerrados, mantené siempre una ventana abierta.
- Revisá una vez por año los artefactos de combustión de tu casa con un gasista matriculado. Hacelo preferentemente durante el invierno, cuando más se utilizan estos artefactos.
- Chequeá que la llama de gas sea azul. Si es amarilla o anaranjada, puede haber presencia de monóxido de carbono.
- Limpiá las hornallas para que los alimentos no obstruyan los quemadores y generen una mala combustión.
- Si tenés red de gas natural, en las habitaciones las estufas deben ser de tiro balanceado.
- Si usás gas envasado, como garrafa o cilindro, la ventilación de la habitación debe estar a la altura de los pies.
- No instales calefones o estufas en baños o espacios cerrados.
- Si tenés un detector de monóxido de carbono instalado, chequeá que siempre esté activo.
Ante los primeros síntomas:
Debilidad, cansancio, sueño, dolor de cabeza, náuseas, vómitos, dolor de pecho y aceleración del pulso, abrir puertas y ventanas, ventilar rápidamente, salir del ambiente contaminado.
Llevar a la víctima rápidamente al Hospital, o al Centro asistencial más próximo, aunque haya recuperado el conocimiento. Allí informar al equipo de salud sobre el antecedente de exposición a gases de combustión. Siempre es conveniente consultar con un Centro de Información, Asesoramiento y Asistencia Toxicológico.