Tras el reclamo vecinal avanzan dos proyectos para frenar las torres en Núñez y Belgrano
Fueron el resultado de «mesas de trabajo» convocadas por el ejecutivo porteño ante el aumento de marchas y protestas vecinales en distintos puntos de la Ciudad. Diputados de la oposición acompañarán pero marcaron que «la queja se da en muchos otros barrios que no fueron contemplados».
Los dos expedientes despachados este viernes por la Comisión de Planeamiento Urbano de la Legislatura contemplan reformas al Código Urbanístico para impedir nuevas edificaciones en altura en los barrios de Belgrano y Núñez .
Serán tratados en la sesión del próximo jueves, en respuesta a los reclamos vecinales contra la proliferación de construcciones en esas zonas residenciales caracterizadas por tener casas bajas.
Las propuestas del bloque oficialista intentan dejar sin efecto lo establecido en el Código y así evitar que en dos polígonos de Belgrano y de Núñez sigan aumentando las edificaciones en altura y puedan conservar la identidad de cada barrio sin alteraciones de su morfología.
Una de las iniciativas fue presentada por el presidente del bloque Vamos Juntos, Diego García Vilas, y contempla a la zona del «Nuevo Belgrano«, delimitada por las calles Sucre, Migueletes, Monroe, Blanco Encalada, Cazadores, Mendoza, Dragones, Juramento, Húsares, Echeverría y Ramsay.
La misma apunta a impedir que se levanten construcciones que no sean «casas unifamiliares» en parcelas que tengan hasta 1.500 metros cuadrados de extensión, como también impide la posibilidad de instalarse a comercios del rubro gastronómico; sí permite edificaciones de hasta seis pisos en terrenos de grandes dimensiones.
El colectivo barrial de Belgrano resiste el avance de torres en manzanas con casas bajas, pero también se opone a la aparición de nuevos locales comerciales, sobre todo restaurantes y cervecerías, que fueron habilitados por la normativa urbanística.
El otro proyecto, de la legisladora Manuela Thourte (UCR), plantea «la conservación paisajística del polígono delimitado por las calles Vedia, las vías del FFCC Mitre, Vilela y Cuba», al cual denomina «Lomas de Núñez». De avanzar, abarcará 36 manzanas en las que no se podrán construir edificios de más de dos pisos, y estará prohibido el «enrase», que posibilita igualar los metros en altura de una construcción lindante.
Diputados del Frente de Todos anticiparon que acompañarán las iniciativas e indicaron que la queja vecinal contra las torres se da en muchos otros barrios porteños como Villa Ortúzar, Colegiales, Villa Pueyrredón, Saavedra, Villa Devoto, Parque Chacabuco y Caballito.
En ese sentido, el legislador Matías Barroetaveña dijo que «hay situaciones graves que no están siendo atendidas porque hoy en esta Legislatura no están los vecinos de otros barrios» y destacó que existió «una selección antojadiza» de parte del oficialismo respecto de las zonas contempladas en los proyectos que tuvieron dictamen.
Por este motivo las organizaciones barriales organizaron una nueva convocatoria para el viernes 27 de mayo a las 18:30 hs en las 5 esquinas (Avenidas Álvarez Thomas y Forest) hasta que se contemple a todos los barrios afectados por el nuevo Código Urbanístico.
En respuesta, el diputado oficialista García Vilas reconoció que la sanción del Código Urbanístico «generó problemas en algunas áreas de la Ciudad», e informó que en la Comisión «no fueron presentados proyectos al respecto» más allá de los que abarcan a los barrios de Núñez y Belgrano.
